La semana pasada comenzó un juicio histórico en Francia. Un ex presidente debía comparecer por primera vez ante la justicia. Acusado de corrupción, el ex presidente Jacques Chirac, debía presentarse a la Corte el lunes pasado. El presidente, que dejó su cargo en 2007, es acusado de malversaciones.

¿ De qué se le acusa ?

Chichi, como le dicen, es inculpado de crear empleos ficticios cuando era alcalde de París. Y esto con el objetivo de drenar dinero hacia las cuentas bancarias de ciertos poíticos del partido Reunión por la República (RPR), el ancestro del actual partido de derecha (UMP), formación que Chirac dirigía. Se cree que ese dinero servía para acentar el poder del alcalde (1977-1995) antes de las elecciones de 1995. El año en que Chirac fue electo presidente de Francia.

Dieciseis anios después, le toca  responder por los actos que se le imputan. Pero sus doctores consideran que su estado de salud está muy frágil para atestiguar. La justicia aceptó que Chirac no estuviera presente. Entonces, el jucio histórico tomó un giro particular ya que comenzó en ausencia del principal interesado.

Al principio, se creía que Chirac se presentaría a la Corte al cabo del segundo o tercer día, ahora su ausencia está más que confirmada. El jucio prosigue sin él. El político de 78 años sufre de una enfermedad muy cercana del Alzheimer.

En este video vemos a Chirac en Saint-Tropez fragilizado por su salud.

Su  fragilidad lo salvó de una humillación en el momento en que Chichi es una de las personalidades favoritas de los Galos.

Juicio simbólico

A parte de ser histórico, el juicio es simbólico ya que Jacques Chirac ya pagó de cierta forma la deuda con la alcaldía de Paris.  Chirac le debía más de 2 millones de euros que reembolsó el año pasado gracias a la ayuda de su antigua familia política, el UMP, el partido de la mayoría. Sin ser juzgado, Chirac ya aceptó su culpabilidad pagando el dinero que fue robado. La alcaldía ni siquiera forma parte de los acusantes en el juicio.

Otra acusación de corrupción ha parasitado el juicio. Según Robert Bourgi, un allegado de Nicolas Sarkozy y experto de las relaciones entre Francia y África, Chirac y Dominique de Villepin, su antiguo primer ministro, recibieron maletas llenas de dinero de diferentes dirigentes africanos para favorizar las relaciones entre esos países, a menudo antiguas colonias, y  Francia. Pero no tiene ninguna prueba. Chirac recobró, como por arte de magia, la memoria para defenderse y demandar a Bourgi por difamación.

Sea como sea  Francia si juzga a sus ex-presidentes aunque no estén presentes y siempre y cuando los crimenes que se le imputan no se hayan llevado a cabo durante su presidencia. La inmunidad presidencial y la impunidad van, a veces, de la mano.